Alertan por la preocupación del del hongo fusarium para los bananos.
Como el mayor exportador mundial de bananas y frutas tropicales y el segundo mayor productor mundial, América Latina y el Caribe está particularmente bien posicionada para beneficiarse del crecimiento previsto en la demanda internacional de estos productos, dijo hoy la FAO.
Se espera que la producción y el comercio mundial de las principales frutas tropicales (mangos, piñas, aguacates y papayas) aumente debido a mayores ingresos y al cambio en las preferencias de los consumidores en muchos mercados nacionales y de importación, así como a mejoras en los enlaces de transporte internacional y en la tecnología de carga.
En el lado negativo, los efectos del cambio climático y condiciones climáticas extremas y altamente dañinas amenazan el potencial de producción de la región, particularmente en el Caribe, donde los pequeños estados insulares son especialmente vulnerables a los efectos destructivos de tormentas tropicales cada vez más frecuentes.
Otra amenaza es la creciente prevalencia de plagas y enfermedades que afectan a las plantas, ya que los sistemas de producción industrializados de plátanos y piñas son considerablemente más susceptibles de sufrir brotes rápidos y generalizados.
Preocupa en particular, el riesgo del hongo fusarium (Fusarium Wilt Tropical Race 4) en el cultivo de bananos, el cual hasta ahora se ha limitado a las plantaciones en Asia, Oriente Medio y África, pero preocupa a los productores de la región de América Latina y el Caribe.
¿Un mayor comercio llevará al desarrollo?
Según la FAO, el efecto del comercio en el desarrollo dependerá de una inclusión justa de los pequeños productores y de niveles salariales equitativos para los trabajadores empleados en estas industrias.
Según el reporte, unas 200 000 familias rurales participan directamente en la producción de bananos de Guatemala y se benefician de ella, mientras que alrededor del 80 por ciento de la producción de aguacate en México es realizada por pequeños agricultores.
Asegurar precios remunerativos y salarios justos, mejorar la productividad de los pequeños agricultores y su poder de negociación, aumentar la resiliencia ante desastres climáticos y otros choques, y vincular los lugares de producción remotos a los mercados, son fundamentales para garantizar un crecimiento inclusivo y un desarrollo rural sostenible.
El comercio regional de frutas tropicales, en números
En promedio, aproximadamente el 25% del total de la producción mundial de bananos y frutas tropicales se origina en América Latina y el Caribe, con un volumen de producción anual de aproximadamente 54 millones de toneladas entre 2016 y 2018 (promedio de tres años).
Con un consumo per cápita total anual combinado de 55 kg de bananas y otras frutas tropicales, la región también se ubica como uno de los principales consumidores de estas frutas a nivel mundial.
Más importante aún, los envíos de bananos y de las principales frutas tropicales de los proveedores de América Latina y el Caribe representan aproximadamente el 75% de las exportaciones mundiales, con un volumen promedio anual total de 25 millones de toneladas durante el trienio de 2016 a 2018. De estos, aproximadamente el 80% se destina a los mercados de los países desarrollados, principalmente los Estados Unidos de América y la Unión Europea.
Se estima que el valor total de las exportación de bananas y de las principales frutas tropicales de América Latina y el Caribe alcanza alrededor de US$11 mil millones en 2016-2018, de los cuales los bananos y los aguacates representaron alrededor de US$6.000 millones y US$3.500 millones, respectivamente.